NO VIAJARÍA CON MIS HIJOS SIN ESTO
Viajar con mis hijos es de las mejores experiencias que he tenido en mi vida. Ver sus caritas de felicidad y asombro frente a experiencias únicas son recuerdos imborrables que atesoraré por siempre, pero hay cosas que no transo a la hora de viajar con ellos. Te dejo el detalle de cuáles son:
Internet. Si viajas con niños, debes tener capacidad de respuesta frente a imprevistos que puedan ocurrir de la manera más rápida posible. En ese sentido viajar sin conexión a internet es un riesgo que yo no corro.
Necesito poder estar conectada cuando yo quiera, donde quiera y el tiempo que quiera. Te recomiendo esta eSIM en particular que tiene excelente cobertura por todos los lugares donde anduve. Podrás activarla en prácticamente todo el mundo y es demasiado económica. Si pinchas acá, tendrás un descuento en la compra de ella.
2. Separadores de equipaje. Para mi son un must a la hora de viajar con niños. Separo su ropa y me permite armar y desarmar la maleta/mochila en muy poco tiempo. Aquí te dejo mis favoritos que son buenísimos, económicos y transparentes, algo que me hace todo más práctico. Aprieta acá.
3. Flexibilidad a la hora de viajar. Esto no es algo que se compre, sino que una actitud de vida y, en este caso, de viaje. Ten en cuenta que viajando con niños tus planes pueden cambiar rotundamente de un momento a otro, así que tranquilidad, respirar profundo y reprogramar.
Prioriza el bienestar y comodidad de los niños siempre, la torre Eiffel siempre estará donde está y puede esperar. Un plan B puede transformarse en una oportunidad.
4. Seguro de viaje. Viajar seguro y confiado es lo mejor que puedes hacer. Imagínate tener cualquier inconveniente en alguna localidad remota y no tener acceso a salud. Yo recomiendo hacerlo en manos de profesionales y expertos que son capaces de solucionarte cualquier tema grave que tengas a lo largo de tu viaje, a la hora que sea, el día que sea.
Hay algunas agencias que ofrecen sólo cobertura médica, pero hay otras que junto a eso van más allá y responden frente a otros inconvenientes que tengas, por ejemplo, pérdida del equipaje, extravío del pasaporte, perder un vuelo de avión, entre otras. Te recomiendo contratar esta segunda alternativa y dejar tus preocupaciones en manos de verdaderos expertos. En el siguiente link, puedes contratar a los mejores y con descuento si lo haces pinchando aquí.
5. Botiquín. Para mi es necesario armar un botiquín con medicamentos actualizados para cada viaje, es decir, antes de incluirlos fijarse en la fecha de expiración de cada una de las cosas que voy echando en él. A continuación te dejo una recomendación, pero de todas formas te sugiero consultar con tu médico de cabecera. Además, éste puede variar según el destino que elijas.
Para el estómago:
Antidiarreicos: Para tratar la diarrea ocasional.
Antieméticos: Para aliviar náuseas y vómitos.
Analgesicos y antiinflamatorios:
Paracetamol o Ibuprofeno: Para el alivio del dolor y fiebre.
Antihistamínicos:
Antihistamínicos orales: Para tratar alergias y picaduras de insectos.
Crema antihistamínica: Para aliviar picaduras de insectos y erupciones cutáneas.
Antibióticos de amplio espectro:
Prescritos por un médico: Para infecciones bacterianas (únicamente bajo recomendación médica).
Repelente de insectos:
Con alto % de DEET: Para evitar picaduras de mosquitos.
Protector solar:
Amplio espectro y resistente al agua: Para protegerse de los daños del sol.
Vendajes y desinfectantes:
Vendajes adhesivos y apósitos: Para pequeñas heridas y cortes.
Alcohol o solución salina: Para limpiar heridas.
Medicamentos para enfermedades preexistentes:
Medicamentos recetados: Asegurarse de tener suficiente para todo el viaje.
Medicamentos contra la malaria (si fuese necesario):
Prescritos por un médico: Si viajan a áreas con riesgo de malaria.
Jeringas y agujas estériles (si es necesario):
Para emergencias médicas o si necesitan inyecciones.
Termómetro:
Para monitorear la temperatura corporal en caso de fiebre.
Por otra parte, es fundamental llevar recetas médicas para los medicamentos recetados y conocer las regulaciones de los países que visitarán, ya que algunas sustancias pueden estar restringidas. Además, es aconsejable investigar sobre las condiciones sanitarias y vacunas necesarias para cada destino específico.